La demanda de alquileres comenzó a repuntar en julio tras la fuerte devaluación que se registró luego de la corrida cambiaria de fines de abril, que dejó a muchos tomadores de créditos sin poder acceder finalmente a sus viviendas. Ante ese escenario, comenzaron aumentar las consultas para adquirir los denominados “seguros de alquiler”, en reemplazo de las garantías propietarias, que siguen siendo un dolor de cabeza para los inquilinos, explicaron fuentes del sector inmobiliario.
Los datos de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA) y el Instituto Asegurador Mercantil confirman un fuerte incremento en las consultas de los potenciales inquilinos sobre el sistema de pólizas “Garantías de Alquiler”.
En tanto, explicaron que en un escenario de dólar y tasas altas, la compra venta comienza a desacelerarse, pero los alquileres mantienen su ritmo o, en su mayoría, suelen incrementarse.
María Luz Gómez, gerente comercial del Instituto Asegurador Mercantil, dijo que en julio último se produjo una explosión de consultas por el sistema de garantías de alquiler que ofrecen.
Puntualizó que las consultas se duplicaron en julio con relación a junio, y la tendencia seguiría creciendo en el segundo semestre. “Los seguros de alquiler operan en todo el mundo como dinamizadores del mercado de renta. Al facilitar el cierre de operaciones, constituyen un excelente instrumento para las inmobiliarias”, explicó Gómez.
La razón es que la póliza permite que el propietario tenga un inquilino con ingresos comprobados y suficientes, y obtenga certeza respecto del pago del alquiler en tiempo y forma. A su vez, respalda también los servicios y el cuidado de la propiedad.
Fuentes del sector indicaron a NA que nueve de cada diez operaciones que se cierran a través de internet utilizan las garantías de alquiler como herramienta para lograr cumplir con las pretensiones de los propietarios.
El fenómeno comenzó a interesar sobre todo a los jóvenes de entre 20 y 30 años, y también a extranjeros, que en general son los que más dificultades encuentran a la hora de obtener ese respaldo propietario.
En ese marco, cabe destacar que el déficit habitacional ronda los 3 millones de viviendas, la mayoría en el AMBA, de acuerdo con datos oficiales y de las inmobiliarias.
• ¿Cómo funciona el sistema de garantías?
El sistema de “Garantía de Alquiler” es un seguro de caución que resuelve los habituales inconvenientes facilitando la operación, tanto para el locador, como para el locatario.
Esta póliza mostró “buenos resultados desde su lanzamiento y vuelva a tomar impulso en las actuales circunstancias, facilitando de manera rápida y eficiente el acceso a la vivienda”, explicaron a NA desde el Instituto Asegurador Mercantil.
La Garantía de Alquiler cubre la renta, las expensas, los impuestos, los daños a la propiedad, gastos jurídicos, responsabilidad civil (cristales, robo, incendio, entre otros), servicios de emergencias, y cobertura para el inquilino y su grupo familiar por todo el contrato. La aseguradora promete responder en un plazo máximo de 15 días en caso de existir impagos.
En tanto, el inquilino accede con requisitos mínimos, como ingresos comprobables y la posibilidad de contar con un codeudor, si su salario resultara insuficiente, para garantizar las exigencias de la operación.
El costo es equivalente a un mes y medio de renta que se abona con diversos medios de pago, y la operación carece de gastos de informes y comisiones y se puede precalificar online.
Por su parte, el propietario obtiene con esta póliza el respaldo que exige: inquilino con ingresos comprobados y suficientes, certeza respecto del pago de la renta mensual en tiempo y forma, también de los servicios y resguardos en el cuidado de la propiedad.
A su vez, se libera del problema que significaría la eventual necesidad de ejecutar las garantías en caso de incumplimientos.
El de la garantía propietaria, suele ser uno de los obstáculos más difíciles de salvar y en innumerables ocasiones impide el buen término del acuerdo. Las altas exigencias de los propietarios para resguardar su bien, confrontan con las dificultades de los locadores para conseguir los avales requeridos. No siempre hay familiares o amigos disponibles y dispuestos para salvar la situación. Por eso, esta cobertura ofrece una solución eficiente y accesible para acercar a las partes. Aplica tanto para alquileres de viviendas familiares, oficinas profesionales o comercios”.
(Fuente): Ambito